Llevaba un tiempo sin aparecer Carlos Márquez con su sección Visión periférica y vuelve con fuerza para hablarnos de un talento nacional que se está saliendo en la pretemporada del Levitec Huesca, aprovechando la ausencia de los hombres altos de su equipo. Hablamos de Ramon Vilà (Barcelona, 1997), una promesa en ciernes, internacional español en categorías inferiores, formado en la cantera del Barça y que salió hacia la NCAA para poder compaginar baloncesto y estudios. Su primera parada fue Arizona State, pero ante la falta de oportunidades se fue a Chattanooga (con año Redhirt incluido), donde ha permanecido tres temporadas. A pesar de poder tener un año más de elegibilidad, y tras acabar ya la carrera, decidió saltar al profesionalismo estando en su año júnior. Por esa razón, no salía en el artículo de jugadores españoles que cerraban ciclo universitario en EEUU.

Entregas anteriores
Jaume Lobo / Javier Herrero
Juan Gabriel Martínez / Imanol Artiñano
Jorge Martínez / Jonathan Klussmann

NOTA. Recordamos que la valoración del juego que realiza Carlos Márquez es una visión del jugador tras la visualización de partidos, sin realizar valoraciones del plano personal, siendo meramente reducidas al deportivo.

Regresa a España Ramon Vilà tras su periplo formativo en la Universidad de Chattanooga, y lo hará formando parte del Levitec Huesca de LEB Oro, categoría ya conocida por él cuando militaba en las filas del filial del FC Barcelona allá por la temporada 2015/16. Ramon es un interior diestro de 204 centímetros y 110 kilos de peso, que cumplió 23 años el pasado 11 de septiembre.

Como jugador, su zona de confort se encuentra en la pintura. Se trata de un interior de buen motor e intensidad, que parece jugar con un extra de motivación. A pesar de no ser muy explosivo, posee cierta movilidad. En ataque destaca por su profundidad en el pick and roll y por el juego de poste bajo.

De espaldas a canasta es capaz de cuerpear para ganar la posición y recibir la bola, pues tiene un excelente dominio del cuerpo que le permite mantenerse siempre bien equilibrado, absorbiendo el contacto. Puede girar hacia ambos hombros, aunque se siente más cómodo a derechas. Cuenta con un buen juego de pies y sabe usar el up and under. Posee un resolutivo gancho con la derecha que sabe manejar ganando el corazón de la zona, o el lateral del poste bajo. Es capaz de generar para los demás desde el poste, ya sea en inversión directa o pasando al corte, pues tiene visión y capacidad de pase gracias a su IQ, lo que le permite tomar decisiones acertadas.

Al ser un jugador joven, su evolución pasa por consolidar la amenaza exterior y el juego de cara a canasta. Ramon tiene los mimbres para meter tanto de media como de larga distancia, pues posee buena mecánica y acierto en el tiro. Simplemente necesita seguir trabajando en este aspecto para ganar confianza y sentirse cómodo en estas distancias. Una vez amenace desde perímetro, su IQ y habilidades técnicas le harán desarrollar el juego fuera-dentro de forma natural. Esto lo convertirá en un anotador más versátil. En cuanto a la generación de cara a canasta, ya hemos hablado de su visión de juego, que le permite jugar high-low, pasar al corte y jugar con y sin balón en posiciones perimetrales. Se le intuyen habilidades e instinto de organizador.

Hay que destacar su solidez como jugador de pick and roll. Sabe dar profundidad al ataque, atrayendo el bump y obligando a contraer las defensas. Es capaz de poner buenos bloqueos, sellando al defensor balón y girando con rapidez, lo que le permite ganar el espacio para crear buenos ángulos de pase. Sabe cuerpear para ganar espacio en la finalización. Gran capacidad de resolución cerca del aro donde emplea distintos recursos. Tiene la virtud de finalizar muy rápido y con bastante acierto gracias a su muñeca (soft touch).

En lo referente al juego sin balón perimetral, usa mano a mano, bloqueos indirectos, inversiones… siempre dándole sentido al juego y continuidad a las ventajas para los compañeros. No se entretiene con balón, no lo para. Lee perfectamente los espacios y le da continuidad al juego. Posee timing natural para dar fluidez al ataque. Suele tomar buenas decisiones. Ramon realiza un excelente trabajo en el juego sin balón en posiciones interiores. Genera espacios para los exteriores cuando atacan la zona. Lee los movimientos en el perímetro y se mueve con inteligencia, ofreciendo líneas de pase para recibir y finalizar rápido. Juega situaciones de bloqueos indirectos de salida (pindown, carretón…), creando o manteniendo la ventaja para sus compañeros, ofreciéndoles continuidad en las acciones gracias al dominio de los espacios. Puede jugar con otro interior sin problemas, pues es capaz de leer y adecuarse a los movimientos en espacios interiores. En cuanto al rebote ofensivo, posee intuición y tiene un gran sentido de la colocación. Es capaz de ganar espacios a la espalda de la defensa.

En términos de defensa individual, Ramon es un decente defensor balón en poste bajo. Tiene motor y es capaz de cuerpear y aguantar el 1×1. Es activo de manos. Es consciente de sus propias dimensiones, lo que le ayuda a saber manejar los espacios a su alrededor. Va bien defendiendo en 3/4. Es duro de superar, pero debe mejorar su lateralidad. Cuando defiende de cara tiende a guardar la canasta, por lo que puede dar un paso atrás. No es intimidador, aunque tiene buen timing para el tapón. Bajo el aro levanta los brazos y aguanta posición. Necesita medir la intensidad de sus acciones para evitar meterse en faltas innecesarias. En cuanto a la defensa balón en perímetro, Ramon siempre ha jugado en la posición de cinco, ya sea en categorías inferiores españolas como en sus cuatro años de NCAA, por lo que tiene tendencia a guardar la zona y dar distancia a interiores cuando están en el exterior. Su intención es que no le superen y estar atento a los posibles cortes. Su defensa no balón en lado ayuda está basada en ocupar la zona para guardar posibles penetraciones y/o cortes de cualquier tipo. Con esto consigue estar en zona de rebote defensivo. Es muy comunicativo y está siempre pendiente para alertar a los compañeros de los movimientos del ataque. En defensa no balón lado fuerte está atento a su par y mete intensidad si recibe la bola, pero normalmente guarda la zona para poder reaccionar defensivamente si el juego se precipita hacia el interior.

En la defensa del pick and roll, la defensa que más ha jugado en los últimos años ha sido hundirse y guardar la zona, aunque es capaz de saltar a balón y recuperar. Se muestra intenso y activo, pero aún puede mejorar en los segundos esfuerzos. Trata de eludir el mismatch para no ser rebasado. En la defensa de conceptos en exterior, como mano a mano y bloqueos indirectos, suele hundirse y guardar atrás para evitar penetraciones, aunque no tiene miedo a cambiar o saltar a balón si es necesario. Al ser un jugador de tendencia tan interior y que da profundidad al ataque, suele quedar fuera de balance en las situaciones de pelea de rebote ofensivo, aunque corre bien el campo y se esfuerza por recuperar rápido su posición.

Y si nos centramos en las capacidades competitivas, Ramon es un jugador altamente competitivo. Gracias a su buena mano y sus habilidades interiores es capaz de ser determinante en momentos del partido. Se implica en el liderazgo del equipo. Es comunicativo. Posee un buen instinto para leer los partidos, toma buenas decisiones y juega con intensidad.

Su incidencia en la Southern Conference ha sido destacable, quedando segundo en el PER con un coeficiente de 28.2 (ratio de eficiencia global), tercero en ORtg (Offensive Rating / produciendo 126.7 puntos por cada 100 posesiones) y cuarto en eFG% (Effective Field Goal / con un coeficiente de .619). Sus números globales de la temporada han sido de 13.36 puntos (61.7% T2), 5.76 rebotes (2.39 RO) y 1.27 asistencias.

Ramon Vilà es un joven valor con unas bases sólidas de baloncesto en posiciones interiores. En su paso por NCAA-DI ha adquirido experiencia competitiva, mejorando su incidencia en el juego y desarrollando capacidad de liderazgo. Afrontará su segunda etapa en LEB Oro en Peñas, donde tendrá la oportunidad de seguir creciendo en una liga muy exigente. Tendrá que adaptarse a competir contra jugadores de mayor experiencia, altura y movilidad, con el fin de ganar la regularidad que le permita asentarse en el núcleo del equipo y ser un jugador cada vez más determinante para su entrenador y con mayor presencia en la liga.

A nivel individual, deberá seguir trabajando con vistas a mejorar en aspectos exteriores, permitiéndole tener más recursos y generándole confianza en sus capacidades. Esto le proporcionará gran versatilidad en su juego y le situará todavía más en el camino correcto para ligas superiores.