Van pasando las semanas y va tocando su fin el ciclo de scoutings NCAA de este verano, salvo alguna sorpresa de última hora. Tras hablar de exteriores y de ala-pívots, es turno de mirar a los ‘cincos’ séniors/ superséniors con pasaporte comunitario/cotonú y que, en cierto modo, son accesibles para Ligas FEB desde un punto de vista económico, dejando fuera nombres como los de Tass, Brajkovič y Welp, por ejemplo.
Además, ya se han producido varias firmas que nos ha privado de ver nombres interesantes como James Karnik (Suiza), Kevin Marfo (Italia), Cheikh Mbacke Diong (Montenegro), Patrick Tape (Reino Unido) y Abdul Ado (según varias informaciones pasaría a los banquillos).
Rey Idowu
EEUU – Nigeria / 206 cm
Tulsa
19 mi, 7.9 pt, 4.7 re
Empezó en Illinois State, donde estuvo dos campañas antes de irse a Tulsa para tener una participación fluida. Un interior con muy buen tren superior, una piedra física, con buenos bloqueos y que cuando recibe cerca del poste usa su potencia de espaldas al aro. Capaz de trabajar el rebote ofensivo, atrás hace buenas ayudas y es capaz de ir al rebote en su aro por su buena capacidad de colocación. Un perfil determinado interesante que hemos visto otras veces. Su pasaporte cotonú debería estar ya en su poder este verano.
Rodney Miller
EEUU – República Dominicana / 1996 / 213 cm / 108 kg
Miami FL
17 pa, 4 mi, 1.6 pt, 0.6 re
Jugó con la U17 dominicana en su momento y lleva toda su carrera en Miami FL, aunque sin muchas oportunidades o tocado como la pasada temporada, pero tal vez nos debemos quedar con la 19/20 (23 mi, 7.2 pt, 5.5 re). ‘Cinco’ grande, con cuerpo, sabe ganar la postura y jugar de espaldas al aro y soltar el gancho de forma efectiva, así como aprovechar su espacio. Atrás, ocupa sitio; le cuesta salir de su zona de confort, pero cerca del aro es como un muro. A mí me recuerda a un perfil Kyle Rowley, aunque hay que ver con continuidad su evolución.
EJ Anosike
EEUU – Nigeria / 1998 / 201 cm / 111 kg
Cal St Fullerton
31 mi, 16.3 pt, 8.3 re, 1.8 as
Empezó en Sacred Heart destacando, saltó a Tennessee pero no le dieron bola y volvió a bajar un escalón con los Titans para volver a destacar. Debe rondar los dos metros, pero con muy buen tren superior. Jugador muy interior que cuando recibe culea muy bien, girando a ambos lados y sabiendo controlar cuando soltar el balón y protegerlo, sacando con frecuencia 2+1. También controla bien el trabajo sin balón o sobre el rebote ofensivo. Su juego de cara al aro es mejorable, pero no es tan efectivo como cerca del aro; en defensa, puede sufrir ante pívots altos o en los desplazamientos laterales. Si ponemos imaginación sería un perfil Lottana Nwogbo, que tan buena imagen dejó en Coruña.
Nikola Marić
Bosnia y Herzegoniva / 1998 / 208 cm
UALR
27 mi, 13.3 pt, 6.1 re, 2.5 as, 0.8 ro
El bosnio es un viejo conocido (y además cupo) con pasado en Joventut, Fuenlabrada y Andorra (con este último debutó en ACB). Se marchó a la NCAA, donde produjo desde su primer año, con dos últimas temporadas muy buenas a nivel estadístico. Es un 4.5 que siempre suma: un rechace que recoge por aquí, un movimiento de pies, un corte sin balón, un putback… No es el más fuerte ni el más alto, ni tiene un rango de tiro sólido, pero esa regularidad, su buen sentido del posicionamiento y su pasado en España le abren las puertas.
Tanor Ngom
Senegal / 1998 / 216 cm
Florida St
12 mi, 5.7 pt, 2.8 re, 0.8 ta
El senegalés tuvo una formación atípica: de Dakar saltó al baloncesto universitario canadiense (Ryerson) y tras tres años allí se presentó al draft para retirar su candidatura y acabar con los Seminoles, donde este pasado curso disfrutó de la condición de titular, que se contrapone a las inexistentes apariciones del 20/21. Jugador liviano, con brazos muy largos y buena movilidad, pero al que la falta de fuerza le condiciona cuando intenta girarse. Con buen tacto a tres metros, cómodo sin balón o con su juego por encima del aro. En defensa, cubre mucho en su radio de acción como protector del aro, aunque realiza faltas innecesarias y aún está en proceso formativo. Su perfil sería un Ibou Badji, salvando las distancias, claro está.
Bourama Sidibe
Mali / 1997 / 208 cm
Syracuse
11 mi, 3.0 pt, 2.8 re
Jugador con pasado en España, pues estuvo cuatro años en Canterbury, siendo incluso MVP del campeonato infantil antes de ser reclutado por nada menos que la prestigiosa Syracuse, destacando la 19/20 (titular: 24 mi, 6.0 pt, 7.6 re) pero con problemas de lesiones la temporada siguiente y rol secundario en la 21/22. Se trata de un 4-5 moderno, liviano, efectivo cerca de canasta, que sabe buscar busca la posición y aprovechar el juego sin balón o de putbacks. Tal vez no tenga un juego dominante de espaldas al aro, pero su envergadura le hace ganar enteros en el trabajo defensivo. Su condición de cupo debería ayudar al senegalés a recalar en Ligas FEB.
Ike Obiagu
Nigeria / 1998 / 218 cm
Seton Hall
21 mi, 2.6 pt, 4.0 re, 3.2 ta
Su buen pedigrí en High School (llegó a jugar el Nike Hoop Summit) le llevó a ser reclutado por Florida State, donde solo pasó su año Freshman para recalar en Seton Hall, universidad en la que ha crecido en importancia en juego las dos últimas temporadas, pero con un rol claramente defensivo (ha conseguido más tapones que puntos). A pesar de ser muy grande no se mueve mal y maneja buen timing para intimidar y defender su canasta, lo que hace que cambie tiros. En ataque, es buen finalizador y tiene recursos (interesante gancho), aunque a veces puede pecar de manos blandas como pasa con este perfil de ‘cincos’. Con ese tamaño es un jugador que puede ir a más en el profesionalismo y por el cual apostar si se es valiente.
Mladen Armuš
Serbia / 1997 / 208 cm
Boise St
26 mi, 7.1 pt, 7.9 re, 0.8 ta
Formado entre el Partizan y Estados Unidos, llegó a la NCAA de la mano de ETSU, produciendo, para luego irse a los Broncos con el mismo perfil. Para mí, el serbio es un jugador interesante con cierto aroma a pívot clásico. No es excesivamente alto, ni veloz, ni potente, pero sabe jugar a esto: movimientos clásicos en la zona sin mucha elegancia pero efectivos, aprovechando muy bien sus movimientos sin balón y siempre bien colocado para el rebote ofensivo y sumar en segundas opciones. Atrás, aguanta bien los contactos y da entrega defensiva a pesar de que le falta algo de explosividad. Una apuesta interesante por su solidez como jugador “currante”.
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