Los objetivos para la temporada, las plantillas, la Liga EBA y algunos otros aspectos de su trabajo, más pasión que profesión, son comentados por los entrenadores del Grupo B que, tras colaborar en la elaboración de nuestra Guía EBA B, coinciden en señalar las peculiaridades y dificultades de esta Conferencia, la más dura a su juicio de las cinco que forman esta liga amateur divididas salvo la Centro en varios subgrupos.

El Grupo B y sus peculiaridades

En los últimos años, dice Nico Fernández de Córdoba, entrenador de Estudio, el Grupo B ha sido “de los más fuertes de toda la Liga” y evaluando la situación del baloncesto en España “o se cambian muchas cosas o habrá años muy difíciles en formación”.

Susma” Rodríguez que esta temporada ha vuelto a la que fuera su casa, el CB La Matanza, se refiere a las diferentes plantillas del Grupo B, unas muy jóvenes y otras con muchos veteranos”, si bien señala que los jugadores veteranos “te ayudan con los jóvenes, les enseñan en el día a día y les ayudan en los partidos”.

José Antonio Ramírez, que continúa al frente de NCS Alcobendas en su regreso a la Liga EBA. dice que es lícito que las canteras ACB “lo utilicen para mejora de sus jugadores jóvenes” y el resto “intentamos hacer el mejor papel posible”. Pero lo que no le gusta al técnico es que si los equipos de cantera no tienen intención de subir de categoría y como el año pasado copan los primeros puestos del Grupo, “al acudir a la Fase de Ascenso dificultan que otros que si querrían subir, puedan optar a ello”.

Sobre la diferencia de plantillas y objetivos en el Grupo B Sergio Jiménez, de Movistar Estudiantes, dice que en el Estu con jugadores junior o senior de primer o segundo año es una buena experiencia enfrentarse a jugadores más experimentados “que les ponen en muchas dificultades para sacar partidos adelante”.

Jaime García, entrenador del CB Majadahonda que debuta esta temporada en EBA, se refiere a las peculiaridades del Grupo B con equipos jóvenes, equipos nuevos, canteras ACB y equipos veteranos, y afirma que esos factores hacen que la competición sea “muy atractiva y divertida”.

Juan Carlos Navarro, al frente del banquillo de Globalcaja Quintanar, dice que “todos los equipos tienen muy distintos objetivos al inicio de temporada y todos deben ser respetables”. Quizás esa mezcla de objetivos y de diferencias en la confección de las plantillas es lo que hace del B “uno, si no el que más, de los grupos más competitivos y de mayor nivel de la Liga EBA”.

Zentro Basket Madrid con un equipo en LEB Plata saca esta temporada uno en EBA a cargo de Jorge Lorenzo para quien el Grupo B y sus peculiaridades es “un debate de muchas horas”. Pero en lo que “todo el mundo está de acuerdo -afirma- es en que su baloncesto es de un altísimo nivel. Con plantillas de diferentes perfiles pero de un nivel competitivo muy alto”.

Para Román Peinado, entrenador del Lujisa Guadalajara Basket, la diferencia de plantillas y objetivos es “la riqueza y dificultad” del Grupo B: “Conjuntos de canteras de equipos ACB mezclados con otros clubes más modestos o de ciudades pequeñas con jugadores más expertos”. El técnico cree que “todos salimos beneficiados y cada uno de los clubes que la disputan (la EBA) son necesarios. Unos con un objetivo más formativo y otros con otro más de promoción de este deporte en el club/colegio de su ciudad”.

También para Juanjo Simón, entrenador de Uros de Rivas, el B es el grupo más difícil de la EBA. “Competimos con tres filiales de ACB más Movistar Estudiantes, “plagados de extranjeros, que entrenan muchas más sesiones que nosotros y que van varios pasos delante, sobre todo físicamente, del resto”. Su objetivo, añade, es “formar jugadores para sus primeros equipos pero al final siempre están arriba, lo que deja pocas opciones al resto de los equipos ´normales´”.

Pero según Juanjo la mezcla de equipos de formación y de competición “nos viene muy bien al resto para jugar más partidos intensos y competitivos, que al final ayudan a la mejora de nuestros equipos”.

Lo primero, mantener la categoría

Mantener la categoría y poder seguir en EBA es el principal objetivo para esta temporada de todos los entrenadores, quienes destacan que la Liga será más dura y exigente al volver al grupo único de 16 equipos.

Mantener la categoría es “un éxito”, según Nico Fernández de Córdoba, para un equipo de jugadores “totalmente amateur” en una liga en la que muchos conjuntos son “semiprofesionales”. Susma” Rodríguez dice que el objetivo es también “seguir consolidando un proyecto que es ilusión en un municipio que apuesta por el deporte” sin “poner metas a nuestro crecimiento”, pero si “ir avanzando con pasos firmes”.

El regreso a EBA de Alcobendas ha supuesto según Ramírez “replantearnos desde el Club el modelo con una apuesta clara por la cantera para iniciar un nuevo proyecto” y por supuesto como objetivo señala salvar la categoría y “si conseguimos estar tranquilos, ir mirando arriba durante el año”. Como objetivo para la temporada Sergio Jiménez señala que el grupo, una generación nueva de jugadores, muchos de ellos debutantes en la categoría y que “vienen a jugar su primer experiencia senior, crezca individualmente”.

Para Jaime García el objetivo es “adaptarnos al nivel de exigencia que nos va a marcar la competición” y “disfrutar trabajando y compitiendo”. A Juan Carlos Navarro le queda “esa espinita de haber estado cerca de conseguir el ascenso” y entre los objetivos para esta campaña destaca competir en todos los partidos y a partir “siendo un equipo, podremos dar mucha guerra”.

Conseguir el ascenso” es el objetivo de Juanjo Simón, porque siempre “nos planteamos el mejorar la temporada anterior, así que el objetivo de ésta no puede ser otro”. Seguir creciendo es el objetivo del equipo que dirige Jorge Lorenzo tratando de ofrecer a sus jugadores de categorías de formación “una trayectoria de crecimiento lo más larga posible”.

También José Luis Pichel, entrenador del CB Fuenlabrada, señala como objetivo mantener la categoría que “utilizamos como estructura formativa y de desarrollo” para que los jugadores “vayan hacia arriba y seguir nutriendo de canteranos al primer equipo”. Tras recordar que vienen de dos temporadas en las que han estado en los puestos de abajo Román Peinado también señala como objetivo lograr la permanencia lo antes posible y hacer una plantilla “que pueda competir cada día” además de “conseguir que el público vuelva al Pabellón”.

Continuar un año más formando parte de esta Liga es el objetivo de Jorge Montané, de Náutico de Tenerife, y con el proyecto del RCNT junto al Lenovo Tenerife “seguir promocionando jugadores jóvenes y continuar trabajando en su formación”. Además de la permanencia Gabriel Rodríguez “Gabri”, del CB Socuéllamos, menciona “intentar hacer una temporada sin altibajos para conseguir mantenernos y afianzar el proyecto”.

¿Pasión o profesión?

Casi todos los entrenadores afirman que el baloncesto es su pasión y muchos de ellos como Nico Férnandez de Córdoba indican que “mi profesión, con la que me gano la vida, al final decidí que fuera otra” porque “conocí la faceta más profesional como entrenador y decidí que no la quería”.

Susma afirma que ¡ojalá fuera profesión” y explica que “debemos compaginarlo y más con esta pandemia”, opina el técnico que “ser profesional no es percibir una remuneración que te permita dedicarte de manera exclusiva. Va en el día a día, en cómo lo gestiones” y “yo me exijo mucho y por ende me gusta rodearme de gente que piense igual”.

José Antonio Ramírez afirma que siente pasión por lo que hace y añade que le gusta el juego, “la formación y la conexión que se produce entre los miembros de cada equipo”. Para Sergio Jiménez es “más una pasión que una profesión” aunque “intentas tomarte el día a día con el mayor compromiso posible” y “dentro de los valores que mueven mi vida”.

También para Jaime García es su pasión aunque “le dedico igual o más tiempo que a cualquier trabajo” e intento llevarlo a cabo “con la mayor profesionalidad, dedicación, trabajo e ilusión posible”. Después de más de 25 años entrenando Román Peinado lo entiende “como una pasión”. Poder ayudar al Club a poner en el mundo del baloncesto a una ciudad como Guadalajara es “un privilegio”, dice el técnico, y su mayor experiencia le ayuda “a disfrutar cada día más de las bondades de este deporte.

Tampoco es su profesión para Juanjo Simón. “Es mi pasión desde hace muchos años, el hobby al que dedico más horas”, y en el mismo sentido se pronuncia Juan Carlos Navarro. Para Jorge Lorenzo el baloncesto es “una pasión que he podido convertir en profesión”. No sabe el porcentaje de cada uno de los dos conceptos, pero lo que tiene claro es que “mi profesión me la tomo con una pasión que me ha ayudado a llegar hasta donde he llegado”.