Quedarse fuera de la F4 supuso el fin de ciclo de Sergio García en Riazor, pero un proyecto sostenible y en continuo crecimiento (estructural, económico y social) no se iba a detener. Sin acometer locuras que pusieran en riesgo el proyecto, los naranjas han ido conformando un equipo que tiene pinta de hacer honor a esa palabra, “equipo”, con el que preguntarse «¿por qué no soñar?».

La primera piedra fue el nuevo inquilino del banquillo: Diego Epifanio ‘Epi’, que llega desde Movistar Estudiantes. Un entrenador joven pero metódico y con amplia experiencia y dos ascensos a sus espaldas. A partir de ahí, el equipo ha cambiado casi por completo, pues solo tres jugadores siguen, y todos ellos ofrecen fiabilidad: Álex Hernández (lo hace en la dirección y habrá que ver cómo progresa su recuperación), Atoumane Diagne (un jugador con recorrido que demostró la temporada pasada que está en plena forma, aportando centímetros y calidad en el poste bajo; con mucho ‘cinco’ top, puede ser decisivo este curso) y el capitán Javi Vega (que sabe llevar al grupo, abre la pista y sin duda demuestra su calidad).

A ellos se unen varios fichajes que ya conocen la LEB Oro. ¿Romperá Olle Lundqvist este curso? El sueco tiene enorme calidad pero debe dejar definitivamente atrás las lesiones y la irregularidad. Más fiabilidad ofrece Aleix Font, que volverá a exhibir su muñeca en la categoría y, si se le da la confianza que precisa, se saldrá, en un caso similar a Álex Galán, que con su polivalencia y garra es un señor fichaje en la pintura.

Finalmente, tres son las apuestas que no conocen España, pero son de valía por su prestigio internacional y pueden dar mucho al equipo. De cada uno de estos tres fichajes os hablamos de forma detallada:

Goran Filipović
Croacia / 1996 / 180 cm

Nada menos que todo un internacional croata, y con minutos. Formado en la mítica cantera de Split, desde muy joven tuvo protagonismo y minutos, entre la 13/14 y la 17/18 (10.4 pt, 4.1 as), en el que fue su último año antes de ser fichado por el Široki bosnio. Allí permaneció dos temporadas destacando y siendo uno de los mejores asistentes de la competición, como sucedió en la 19/20 en la Liga Adriática División 2 (12.5 pt, 5.6 as). El curso 20/21 saltó a Rumanía, al CSU Craiova, donde cuajó otra campaña solvente (13.0 pt, 3.5 as). De forma algo extraña, regresaba a Croacia, al Cedevita Júnior, junto a las jóvenes promesas croatas y jugadores contrastados entre los que se encontraba él (30 mi, 13.3 pt, 5.4 as, 1.4 ro y buenos porcentajes de tiro: 54% T2, 43% T3, 82% TL).

Un jugador que me gustó desde sus inicios en Split por su desparpajo y liderazgo, aunque su carrera tal vez no ha tenido la evolución que se esperaba. Base con carácter, alto IQ, con un excelente manejo de balón y muy buen juego de bloqueo y continuación para ambos lados, con una cabeza privilegiada para asistir y dominio de todas las distancias para el lanzamiento o para penetrar. Sí que, en ocasiones, fuerza demasiado las acciones, lo que le lleva a tener pérdidas innecesarias, unido a un físico que le ha alejado de la gran élite.

Claramente no es un perro de presa defensivo y puede sufrir en Oro ante jugadores físicos o muy verticales, aunque es listo para robar; debe elevar su rendimiento atrás, algo que puede hacer si mantiene la concentración. Otros factores claves son que debe ganar en regularidad y su adaptación a una liga tan exigente a nivel táctico como la LEB Oro, más aún tras su año de Croacia, donde hay un punto menor de intensidad y exigencia que en la competición española.

Pendientes de la recuperación de Álex Hernández, con el internacional croata el Leyma Coruña gana un base que ofrecerá clarividencia y mucha distribución de juego; capaz de hacer correr al equipo, en estático ofrecerá muchas soluciones por su juego de P&R o buen tiro exterior. Si logra adaptarse al nivel de exigencia y a España, puede dar mucha cancha.


Yunio Barrueta
EEUU-Cuba / 1993 / 196 cm

El estadounidense de origen cubano es un jugador que siempre me ha gustado y que tiene una sólida carrera profesional. Destacó en NCAA-DII, en Barry (24.4 pt, 9.3 re) la ya lejana 15/16. Su debut profesional fue en Bélgica (Okapi) la 16/17, haciendo una buena temporada (11.9 pt, 3.6 re) que llamó la atención en Francia. Concretamente, el Denain de la ProB se fijó en él (12.8 pt, 3.0 re). De ahí lo reclutó Nancy, que lo firmó por dos temporadas, exhibiendo buen nivel. La 20/21 no empezó de inicio, pero el Evreux lo reclutó ante la baja de Ahmed y volvió a rendir de forma sólida (15.9 pt, 3.9 re). La temporada pasada cambió de rumbo y se fue a la segunda división de Israel, donde destacó y de qué manera en Maccabi Ashdod (34 mi, 21.7 pt, 7.8 re, 2.8 as), acabando la temporada de nuevo en la ProB, con cuatro partidos en Lille (11.0 pt, 5.8 re). Ahora, sin duda, llega como el fichaje estrella coruñés.

Se trata de un ‘tres’ poderoso con un excelente tren superior que le ayuda a suplir su falta de centímetros en el puesto, contando además con una excelente habilidad para el tiro de tres. Tanto saliendo de bloqueos, como a pies quietos, Barrueta puede anotar con alta eficacia desde cualquier lado de la línea de triple, con un release muy veloz. También va muy bien en la transición (un tráiler) y sabe postear a rivales inferiores físicamente, lo que trabaja muy bien con un fade away muy característico. Tal vez no sea un excesivo manejador con balón, ni un jugador de 1×1, pero sabe encarar con potencia y finalizar cerca del aro.  

Tampoco es un especialista defensivo como tal, sabiendo aguantar las embestidas de su par, aunque tal vez le falte algo de lateralidad y lectura. Puede ayudar en el rebote debido a su buen físico.

Con Barrueta, el conjunto herculino se asegura un jugador de nivel y excelente triplista, pero con más virtudes. Acostumbrado a tener minutos, puede llevar el peso del equipo y huele a que será un jugador importante en Oro y que con una buena adaptación puede marcar diferencias.


Đorđe Simeunović
Serbia / 1995 / 200 cm

El combo forward serbio es un jugador que ha ido en franca progresión tras pasar por varios equipos de su país. Formado en la cantera de Mega Vizura, tuvo su debut sénior la 13/14 en Smeredevo (5.6 pt, 3.0 re), de donde regresó al Mega Leks, permaneciendo entre 2014 y 2017 con un rol secundario. La 17/18 se fue al KK Vrsac, destacando en la Liga Adriática División 2 (14.8 pt, 6.6 re) y acabando ese curso en el FMP Beograd. La temporada siguiente se fue al OKK Beograd, donde volvió a hacerlo bien (13.9 pt, 5.7 re), lo que hizo que el Igokea bosnio lo fichase para la 19/20 (sin demasiada confianza en la Aba League -3.1 pt, 2.2 re-, sus números fueron mejores en la liga bosnia). La 20/21 descendió un escalón, empezando la temporada en el Napredak serbio, donde se salió (22.2 pt, 7.5 re), de tal forma que en febrero era reclutado por el Borac Banja Luka bosnio (10.8 pt, 5.2 re).

La pasada temporada significó la de su salto: al fin salió de los Balcanes y llegó nada menos que a la ProB francesa, siendo fichado por Rouen, donde sustituyó al lesionado Ben Emelogu. Con Brandon Edwards (exOro) y Philmore por dentro, ejerció de ‘tres’ alto con asiduidad, teniendo también minutos en la zona (19 pa, 25 mi, 9.3 pt, 5.3 re, 2.1 as, 1.5 ro).

Con Barrueta en el equipo, el serbio ofrecerá físico y versatilidad, siendo un jugador que va a más de forma progresiva en el tiempo, alcanzando actualmente un momento de madurez óptimo. Capaz de jugar por dentro si se requiere por necesidades de guion, estamos ante un ‘tres’ alto de buen físico, potente, difícil de parar cuando encara el aro, de gran ayuda en el rebote y con otras buenas virtudes, como su capacidad para leer el juego o jugar sin balón y, sobre todo, para sacar ventaja de su superioridad física en el poste con buenos movimientos y la efectividad de su juego de espaldas al aro. Además, es un jugador duro atrás, ofreciendo solidez a su equipo. Con el tiempo ha ido progresando su tiro exterior, siendo capaz de anotar de tres a pies quietos (aún de forma inconsistente: 28% T3). Tampoco es un excelso lanzador de tiros libres.

Se trata de un jugador que en el actual plantel aportará físico, versatilidad, rebote, solidez defensiva y capacidad de encarar el aro o ser efectivo en el poste. Sin duda, un buen refuerzo para el equipo gallego, que está organizando un equipo muy equilibrado, con muchas variantes y que, como hemos dicho en la introducción, puede ser un candidato a sorprender a los teóricos favoritos.