Estamos ante uno de esos momentos importantes en Zona de Básquet y seguimos dirigiendo nuestras miradas hacia jugadores españoles situados fuera de nuestras fronteras. Hoy tenemos el lujo de contar nada menos que con Miki Servera (Palma, 1992), todo un ex ACB y LEB Oro, internacional español en categorías inferiores y, en mi opinión, uno de esos jugadores que, como Asier Zengotitabengoa y Xavi Forcada, entre otros, parece haberse situado en ese grupo con un cierto caché internacional pero olvidados en nuestro país. Servera tiene una dilatada carrera en España pero desde hace cuatro años juega en el extranjero, y todo ello con solo 30 años, que cumplirá el próximo jueves día 14. Aprovechando el periodo estival vamos hablar un poco con él de su experiencia en el extranjero.

Zona de Básquet – Empezamos por remontarnos al verano de 2018, tras varios años de bisagra, sumando experiencias en ACB (UCAM, Zaragoza) y en varios equipos de LEB Oro, siendo Melilla el último de ellos. Entonces das un giro a tu carrera y te marchas fuera de España, en concreto llegas al Reino Unido (Worcester). Con 26 años y una carrera con cierto pedigrí, ¿qué te motiva a dar el salto?

Miki Servera – Después de perder en el quinto partido la final contra Manresa para ascender a ACB, tuve la sensación de querer buscar algo diferente. Aunque estaba en un buen club con Melilla, sentí que necesitaba un cambio de aires. Se me presentó una oportunidad de ir a jugar a Worcester Wolves en Reino Unido gracias a Alejandro Vaquera, que fue un poco el gancho y al que aprovecho para agradecérselo. La verdad es que las condiciones económicas eran muy buenas para lo que en ese momento buscaba, a parte de pagarme en la Universidad un curso en inglés de Sports Management, algo que me pareció superinteresante y me ayudó mucho a la mejora del idioma.

ZdB – La temporada 18/19 la completas en Worcester, en la BBL, que es una liga muy física, con un juego muy de run and gun. Tal vez no es la mejor competición para tus características, pero sin embargo sacas a relucir tu clase y te adaptas perfectamente al juego en esa función de distribuidor. ¿Qué recuerdos tienes de tu primer año fuera?

MS – Fue un cambio grande a nivel de baloncesto, muy diferente el estilo del de aquí, como tú bien dices: mucho más rápido, muchas posesiones y mucho juego de 1×1. Aun así creo que hice un buen año y fue una buena experiencia.

ZdB – La temporada siguiente vuelves a cambiar de país y esa ha resultado ser otra decisión clave, porque la próxima temporada será tu cuarto año en Alemania. Más aún, cuando ese verano de 2019 tienes a tu primer hijo. ¿Qué te llevó a firmar por Hanau en la ProB, que sería equivalente a una LEB Plata española en tanto es la 3ª categoría de Alemania?

Miki Servera – Al año siguiente busco abrir un poco mercado y me llega una oferta de Hanau, equipo que acababa de descender de la ProA y que buscaba volver a ascender, y con un rol muy importante, lo que me llevó a decidirme por ir. Terminamos la liga regular terceros pero lamentablemente aparece el Covid y todo se para: mucha incertidumbre, no saber si se jugaban los playoffs… Fue un poco triste al final porque lamentablemente no pudimos lograr el objetivo de luchar por el ascenso, que era el motivo principal por el que fiché allí.

De todas formas, si tengo que ser sincero, solo pensaba en llegar a España con mi mujer y mi hijo que estaban allí conmigo, ya que no sabíamos si nos iban a cerrar el tráfico aéreo.

ZdB – Tras esa buena temporada, llamas la atención de muchos equipos, pero el gato al agua se lo lleva el Bochum.

MS – Ese verano la verdad es que me llegan ofertas, pero ninguna que me convenciera al 100%, así que fue largo. Tuve la oferta de Bochum muy pronto, pero decido esperar y al final no hubo nada que me convenciera y me volvieron a pasar oferta a finales de verano.

ZdB – Llegas a un club con aspiraciones reales de ascenso y dirigido por un entrenador español afincado en Alemania desde hace muchos años, como Félix Bañobre. La temporada no pudo ser mejor: fuiste una pieza clave y se consiguió el ansiado ascenso.

MS – He tenido la suerte de tener un entrenador español y que valora mi trabajo ocupando plaza de americano en una liga como la ProA, así que es de agradecer, tanto a él, como al club. Personalmente creo que estoy en el mejor momento de mi carrera y puede ser que sea una de las temporadas que más he disfrutado por el estilo de juego y la confianza que tengo.

Finalmente, logramos el objetivo de ascender a ProA en mi primer año en Bochum y renuevo 2 años más.

ZdB – En la temporada recién finalizada, 2021/2022, el equipo ha cumplido su objetivo con la obtención de la permanencia en ProA. Algo digno de mención es que seguíais tanto el bloque alemán como tú y que apenas os reforzasteis, salvo en algún puesto importante.

MS – Yo creo que en un equipo tiene que haber una buena química y un bloque que vaya remando junto. Nosotros no éramos de los presupuestos más grandes, ni mucho menos, pero el bloque estaba muy comprometido con el proyecto y fichamos dos americanos que tenían muchos puntos en las manos, así que nos ayudaron mucho a lograr el objetivo de la permanencia. Siendo recién ascendidos y en una liga como la ProA, con presupuestos de 2-3 millones, es para estar satisfechos. El cambio desde ProB es grande, en todos los aspectos. La ProA es una gran liga.

ZdB – Quiero preguntarte por los jugadores americanos de tu equipo: Dominic Green, recién salido de la universidad, no llegó a jugar y eso que varios equipos de LEB Plata lo miraron de cerca y, después, se ha salido en Eslovaquia y Alemania; Tony Hicks es un base con mucha calidad, pero me ha sorprendido su progresión en su tiro exterior en los dos últimos años.

MS – Tanto Domi como Tony son dos grandes jugadores, con mucho talento, físicamente unas bestias, muy competitivos y con un estilo de juego muy agresivo hacia el aro. Creo que con el tiempo he logrado complementarme tanto con ellos como con Niklas Geske, haciendo de combo y ayudándoles en la posición de base, así que contento por ese pasito personal a nivel de juego.

ZdB – Con la temporada iniciada llegó a la pintura Terrell Vinson, que había jugado su año rookie en LEB Oro. ¿Se acuerda algo de ese primer año profesional o nunca lo llegasteis a comentar?

MS – Sí, jugó en Lleida y a veces me contaba anécdotas y hacíamos alguna broma. Muy bien con él, es un tío que nos aportó veteranía, carácter y tiro de 3.

ZdB – La próxima temporada estás bajo contrato y repetirás en ProA. Ya se conoce alguna renovación y fichaje del equipo, ¿qué esperas de la 22/23?

MS – Sí, como bien dices, tengo contrato para la próxima temporada y la afronto con mucha ilusión, con mucha confianza de poder dar un pasito más en mi juego, ya que conozco la liga y me encuentro en muy buen momento para hacer una muy buena temporada.

A nivel colectivo creo que habría que ser ambiciosos e ir a por los playoffs. Habiéndonos asentado y logrado la permanencia la temporada pasada, creo que es el siguiente paso.

ZdB – Cambiamos de tercio. Tú tienes la suerte, que otros jugadores no comparten, de que tu familia te acompañe en esta experiencia, algo que a muchos americanos no les sucede. ¿Cómo es la adaptación?

MS – Mi familia está allí conmigo y es un gran apoyo. Es un estilo de vida diferente, con un clima diferente y al que no es fácil acostumbrarse, pero bueno, la ciudad está bastante bien y eso ayuda bastante. Además, nosotros vivimos muy cerca del centro y al lado de un centro comercial muy chulo.

ZdB – Al final llevas desde los 16 años lejos de casa. Ahora con los niños pequeños, ¿no sientes alguna vez ganas de regresar?

MS – Como bien dices son muchos años, creo que unos 14 que llevo fuera de mi casa y el sentimiento de regresar con los años va cogiendo fuerza, pero el tiempo y las condiciones marcarán el camino como han hecho hasta ahora.

ZdB – Al menos desde Alemania tienes vuelos a Palma de Mallorca con fluidez.

MS – Hay muchas combinaciones tanto desde Düsseldorf, Dortmund o incluso Colonia y en 2.15 h estás en Mallorca. Aunque muchas veces vamos a Barcelona, ya que mi mujer es de allí y es donde tiene la familia.

ZdB – Durante el verano eres un jugador muy activo: se te ve hacer sesiones de tecnificación con Xavi Sastre, en teoría vas a jugar la Damex Pro League… ¿Crees que debe ser un tiempo de preparación y que, con tu experiencia, aún se puede mejorar cada verano?

MS – Bueno… Xavi Sastre es un gran amigo y un gran entrenador con el que tengo la suerte de poder trabajar en verano. Por supuesto que siempre hay cosas que mejorar y creo que es el mejor momento de enfocarse en la mejora individual, ya que en temporada vas mucho a lo colectivo y no tienes ese tiempo muchas veces para ti. Yo ahora voy a cumplir 30 y siento que tengo muchas cosas que aprender todavía y que me pueden ayudar a ser mejor jugador, así que intento siempre implementar algo nuevo a mi juego con la ayuda de Xavi, que me conoce perfectamente.

ZdB – Para acabar, dos preguntas un poco comprometidas. Muchas veces se habla del submundo LEB, en el que, al no tener condición de categoría profesional, no hay salarios mínimos. Se habla de salarios bajos, de que solo son 8-10 meses cotizando, de un número de horas laborales que no es acorde con la realidad… En Francia hemos leído artículos de las condiciones de los jugadores, ¿nos puedes dar un poco de luz con las condiciones en la ProA?

MS – En la ProA hay de todo, desde jugadores que cobran 1.000 euros a otros que cobran 8.000-9.000. Yo personalmente te puedo decir que estoy muy contento con mi salario, pero siempre con ambición de mejorarlo, al fin y al cabo es nuestro trabajo y es lo que te da de comer.

Por otro lado, creo que viene una de las mejores LEB Oro de los últimos años con equipos como Andorra, Burgos, Estudiantes, que van le van a dar un salto grande a nivel de salarios y nivel a la liga.

ZdB – Vas a completar cinco años fuera de España: ¿no te da la impresión que los medios, la gente de baloncesto de España, se “han olvidado de ti” con solo 30 años y a un gran nivel de juego? Es como si estuvieras fuera de la rueda y no sonases ningún verano.

MS – Totalmente de acuerdo. Creo que al salir de la rueda de España se olvidan un poco de ti, pero bueno, al final fue decisión mía el salirme, yo era consciente de que podía pasar y en esos momentos no me preocupaba porque me iba a algo que creía que era mejor. Actualmente estoy contento en Bochum y si algún día vuelvo a sonar en España será muestra del trabajo que he hecho fuera y ya se verá qué camino cogemos.

Por último, quiero dar las gracias por el apoyo a mi mujer y a mis dos enanos por estar siempre ahí conmigo, que sé que no es fácil, y a vosotros por supuesto, por la entrevista y por hacer visible el trabajo de los que estamos jugando fuera de España . Se agradece, un abrazo.

ZdB – Gracias a ti, Miki.