Era una posibilidad muy real, pero nos ha cogido por sorpresa. Habrá que pasar por caja para ver la LEB Oro en LaLigaSportsTV. Sin duda, la tónica general de los comentarios ha sido hacia lo negativo: por un lado, cobrar por una competición que tiene pocos seguidores, cerrando la puerta a “nuevos aficionados”, y, por el otro, no reunir los mínimos parámetros de calidad (señal inestable, problemas de funcionamiento con Chromecast…).

Los precios de la plataforma de la LaLiga son de 19.99 euros al año y 2.99 al mes. Con la promoción de pagar un mes y conseguir tres meses Premium, si quieres ir pagando mes a mes el tramo de la competición (octubre-junio) saldría más caro que el anual, costando con la promoción inicial un total de 20.93 euros.

Personalmente, el precio anual no me parece caro. Además de la LEB Oro incluye más deportes (balonmano y fútbol sala, entre otros) que, aunque entiendo y respeto que hay gente que este aspecto le dé igual, son interesantes y a veces cuando hay tiempo se ven de pasada o incluso se siguen con interés. En estas fechas, yo mismo como aficionado del OCB de LEB Oro he pagado en menos de una semana 20 euros (10/partido) por ver dos amistosos de mi equipo. Está claro que era baloncesto en directo, pero por el precio de esos partidos, que no eran competición oficial, ya hubiera pagado la suscripción a LaLigaSportsTV. Para ponernos en modo vida real, 20 euros al año son menos que un botellín de cerveza de 33 cl en el bar de al lado del pabellón al mes (a un precio unitario de 2.10 euros supondría al año 25.20 euros). Para los más cafeteros, un café en el centro de Oviedo ronda el 1.40 (16.80 anuales, precio similar a la suscripción). Con esto quiero llevar a entender que el precio en sí no me parece caro. Otra cosa es el contenido.

Si es de pago, es el momento de que el nivel se eleve. Hemos sufrido un año de realizaciones dudosas, con pérdidas del momento actual de juego por repeticiones insulsas. Hemos sufrido cortes en momentos decisivos con la imagen congelada y, para colmo, no hemos podido seguir la liga en todos los dispositivos. Es verdad que la evolución en los años es buena, aunque realmente parezca que sea increíble que en pleno 2021 estemos así. Me explico. Hemos pasado de un CanalFEB con cortes, parones y ángulos de visión para sufridores a una plataforma (¿Cómo era? ¿Guruu?) que metía miedo. De ahí se pasó al acuerdo con LaLigaSportsTV, que televisaba unos pocos partidos, dejándonos la 19/20 en un apagón mediático, que solo se arregló la 20/21, creo yo, porque fue la temporada post-covid y porque la FEB y los equipos se “vendieron” a la ACB permitiendo solo un ascenso en vez de dos, a cambio de una inyección económica desde la ACB que, en teoría, repercutía en los equipos para mejorar la cobertura mediática y poder ver todos los partidos si uno quisiera.

Tras esta evolución, ahora es el momento de pasar por caja, aunque sea simbólico. Hace dos años ni se veía y ahora ya pagas por ello. ¿Pero qué público tiene esta medida? ¿Quién va a pagar? Lo primero es que debemos ser conscientes de que vivimos en un mundo totalmente opaco. Hace algunas temporadas sabíamos las audiencias de las LEB y ahora estos datos se pasan internamente a los equipos de Plata, por ejemplo, pero por cuestiones internas no se hacen públicos de forma general. Los datos no son para nada halagüeños en la pequeña de las LEB, rondando una media de 400 espectadores aproximadamente en cada emisión (además, una final de competición no llega ni a 3.000). Hace años, cuando eran públicos, entre Oro y Plata poca diferencia había, y no creo que con el paso de 3-4 años esta diferencia haya aumentado entre ambas competiciones. ¿Es real entonces el pool de público que puede apostar por este servicio? ¿Habrá 300-400 aficionados de cada equipo que paguen por el servicio? ¿Puede el coronavirus generar miedo a la hora de ir al pabellón -recinto cerrado- y ser más cómodo verlo en casa? La realidad es que estamos en un momento que hay una oferta de todo. Vemos como la audiencia en ACB cae en picado y como a la Euroliga le cuesta, manteniéndose solo la NBA y creciendo debido al exquisito trato del producto (todas ellas son de pago). En Europa, muchas otras ligas son de pago, pudiendo cambiar cada temporada esta condición, pero al final es una práctica común.

¿Es la LEB Oro una liga interesante más allá del aficionado de cada equipo? Está claro que este curso puede ser especial. Tener a Movistar Estudiantes en la categoría es un reclamo y se nota la gran afición que tiene detrás apoyándole, pero esta competición ya tuvo equipos como Bilbao con ese peso. Incluso la hipotética llegada de Marc Gasol podría traer más atención, pero no nos engañemos: la LEB Oro es una liga larga y en enero-febrero todo el mundo desconecta de las redes, empiezas a perderte algún partido de tu propio equipo y ya solo visualizas la fase decisiva.

Otro tema en el que ya incidimos antes es que, si es de pago, hay que mejorar el producto (calidad de la retransmisión). Esto no es solo poner resúmenes, un TOP5 de la jornada y alguna jugada espectacular. Hay que ir más allá: hacer un tablero informativo, previas… Ofrecer contenidos. Los derechos son suyos y al pequeño usuario nacional que intentaba difundir de forma humilde y sin pretensiones se le ha recordado que no se puede hacer y que esos derechos no les pertenecen (como es lógico y de ley), pero la gente de Oro quiere más. ¿Podrá saciar LaLigaSportsTV nuestra sed de contenidos de LEB Oro de forma satisfactoria?

También está por ver qué pasará con las plataformas/televisiones locales, que solían encargarse de la realización en determinados casos y sobre lo que hablaba Ramón Juan en una excelente entrada sobre el tema. Al final, preguntar a los propios protagonistas por los beneficios de los derechos a LaLigaSportsTV o por el dinero de sacrificar un ascenso a la ACB es crear un silencio incómodo. Como un simple aficionado, como con otros temas de la vida, es mejor ni saber ni ver.

La realidad es que la LEB Oro es una competición a la que le cuesta llegar a un público más allá del específico, que durante años ha sido maltratada y que solo hay que ver la escasa creación de contenidos propios de la propia web, responsabilidad de la FEB, que cada curso va a menos. Sirva el detalle de que la tabla de mercado de esta temporada la han sacado casi a finales (con casi 200 fichajes ya anunciados) y que se han ido cayendo poco a poco las guías oficiales, reducidos los contenidos propios al esfuerzo de algún titán que dentro de la redacción federativa intenta seguir creando contenidos.

Al final, la realidad es que la opinión de los aficionados pesa poco, por mucho ruido que se haga. Los derechos pertenecen a LaLigaSportsTV, que hace lo que cree conveniente. En nuestra mano está pagar o no, así como buscar fórmulas alternativas. Yo pagaré y rezaré para que haya un salto de calidad, que dudo que lo vea, aunque en mi retina estará el recuerdo de hace dos temporadas, cuando ni se veía y había que tirar de radio.


NOTA. Zona de Básquet no se responsabiliza de las opiniones vertidas en el texto anterior.