La Unió Esportiva Sant Cugat nace de forma oficial en el año 1986, tomando el testigo de un Club Bàsquet Sant Cugat que termina desapareciendo por diferentes motivos (contaba con una historia de unos 40 años). La localidad del Vallès Occidental tiene más de 90.000 habitantes y sobresale por su práctica deportiva, en la que cuenta con varios equipos en categorías estatales: el voleibol femenino, el hockey hierba y sobre patines, el rugby y el balonmano son ejemplos de su destacado papel. En el mismo club convive el baloncesto con un deporte, el tenis de mesa, que cuenta con jugadores en el TOP10 estatal.

Justamente esta “competencia” no hace fácil que en el baloncesto femenino hayan podido llegar aún a categorías FEB, aunque, como en la base masculina, tienen más de un equipo en todas las edades. Así pues, estamos ante un club que cuenta con 29 equipos de baloncesto de base a los que hay que añadir 5 equipos senior, una escuela de baloncesto y un equipo con chicos y chicas con discapacidad psíquica (UESC ASDI) y uno de niños y niñas con Trastorno de Espectro Autista (UESC TEAM). Una masa social de unas 400 familias. Por conocimiento propio puedo afirmar que la UESC, nombre con el que se le conoce a nivel catalán, tiene un nombre y un prestigio importante tanto a nivel de su localidad como a nivel territorial. Cuentan con equipos masculinos en el máximo nivel competitivo catalán, categoría preferente, donde se codean con los clubs de élite catalanes.

Éste es el primer año en el que a nivel senior cuenta Sant Cugat del Vallès con un equipo de baloncesto en categoría estatal, aunque en su momento el CB Sant Cugat militó en la entonces llamada 2ª nacional. Un reto que desde el club viven “con mucha ilusión, aunque la pandemia del covid19 no nos permite disfrutar de la competición como quisiéramos. Nos habría gustado que el campo estuviese lleno de jugadores y familiares acompañándonos en esta nueva categoría” comenta su presidente Vicenç Beltran, con el que hemos podido conversar para realizar este reportaje. El equipo de Liga EBA, que milita en el grupo C2, ha tenido que jugar los primeros partidos en las instalaciones del colegio Europa, de la misma ciudad, puesto que en las instalaciones públicas donde juegan sus equipos el ayuntamiento tenía que cambiar las canastas. “Somos unos privilegiados porque al menos este equipo puede jugar, porque en el ámbito catalán no se puede todavía, después de más de 9 meses”. De momento, ofrecen sus partidos en streaming por su canal de Youtube, que cuenta con más de 300 subscriptores y que en sus directos consigue una importante audiencia.

Para su funcionamiento, el club cuenta con un presupuesto de más de 300 mil euros, que proviene mayoritariamente de las cuotas de sus socios. También reciben subvención de su ayuntamiento, aunque ésta no llega a cubrir ni el 3% del presupuesto total. Vicenç Beltran nos explica que “el patrocinio de Assegurances Catalana Occident nos ayuda mucho para mantener el 1er equipo en Liga EBA, una competición con importantes gastos federativos. El club tiene una estructura basada en una Junta Directiva formada por madres y padres voluntarios, que marcan la estrategia general del club y que están repartidos en diferentes áreas de responsabilidad. A partir de aquí, tenemos un grupo de profesionales, repartidos en estas parcelas. El área deportiva está dirigida por el Director Técnico, Dani José que, junto a tres coordinadores, gestionan el día a día. También tenemos un área de Oficina, Compras y Logística, el área de comunicación, servicio de fisioterapia y además, todos los entrenadores tienen contrato laboral. El área de tesorería, económica y laboral, junto con el área social y de salud, están desarrolladas por miembros de la Junta que, como he dicho antes, son voluntarios, a los que quiero aprovechar la oportunidad para agradecer su dedicación constante y altruista”. Aunque el club cuenta con algunos patrocinadores, a diferencia de otros clubs de la categoría, éstos no dan nombre a sus equipos, “nadie nos lo ha planteado de momento, si llega el momento nos lo plantearemos”, dice Beltran.

La UESC consiguió el ascenso de categoría como premio a su trayectoria en la Copa Catalunya, aunque tuvo que esperar a renuncias, y para esta temporada el grueso del primer equipo proviene del equipo de la temporada anterior, hasta 8 jugadores, con algunas incorporaciones puntuales en puestos que no tenían bien cubiertos como el de base, con la incorporación de dos jóvenes jugadores, Sergi Estany y Pol Rodríguez, o en el exterior, como es el caso de Nil Baqués, Roger Aldeán (más 4 que 3) y el escolta Alex Olivé, con experiencia en la categoría. Al frente del equipo sigue el mismo entrenador que consiguió el ascenso, Norberto Guerra. Sin duda que la apuesta por los jóvenes dará continuidad a la plantilla en las próximas temporadas, algunos jugadores del sub-21 preferente de la temporada anterior y del senior B, que entrena el entrenador ayudante del equipo EBA y que han rejuvenecido mucho en ésta, ya están en dinámica del senior EBA.

Según Beltran “el objetivo del equipo EBA es conseguir la permanencia, nos gustaría continuar en esta categoría tan exigente e ilusionante, aunque si se volviese a Copa Catalunya no sería para nosotros un desastre. En cuanto al femenino, el objetivo de nuestro equipo en Primera Catalana también es consolidarse en la categoría, con un equipo muy renovado en esta temporada y con mucha ilusión para empezar a competir. Respecto a los equipos de formación, nuestro objetivo es seguir consiguiendo que la gente joven de nuestra ciudad siga disfrutando del baloncesto, jugando cada cual en el nivel que le toca y, si puede ser, consolidarnos poco a poco como un club con equipos en categoría preferente en chicos y aumentar los equipos y el nivel en chicas”.

Para acabar con la entrevista al presidente de la UESC, le preguntamos sobre la convivencia en una situación tan difícil como la que se está viviendo desde el punto de vista sanitario: “Está siendo una situación muy compleja. A principio de temporada la FEB nos confirmó que la competición se iniciaba y que era obligatorio que cada semana, 72 horas antes de cada partido, los jugadores y cuerpo técnico, se hicieran el test para detectar posibles positivos por covid19. Una medida de prevención añadida que vemos bien pero que no estábamos de acuerdo que fuera a cargo de los clubes. Era un imprevisto que se sumaba a los elevados gastos que tiene esta categoría, que no podemos olvidar que es Liga Española de Baloncesto Aficionado. Los clubs catalanes tuvimos una posición unánime y a través de la Federación Catalana de Bàsquet se alcanzó un punto de encuentro. La competición se ha recortado de 22 a 12 jornadas y la FEB asume los test y médico de las 3 primeras jornadas. El resto corre a cargo del club. Un nuevo gasto que complica aún más cuadrar los números de un club que, como sabéis, tenemos una situación muy compleja de gestionar con la pandemia”.


Autor: @Xavier_Boix