Tal y como había adelantado La Región el 15 de mayo, la Federación Española de Baloncesto, a través de su Comisión Delegada, ha aprobado el cambio de denominación de sus tres categorías masculinas, así como la creación de una nueva Copa, que supone la desaparición de la Copa Princesa y de la Copa LEB Plata. Este segundo cambio es en realidad el de mayor calado, el único que supone, al menos por la información proporcionada, una reestructuración efectiva. Por el contrario, la nueva denominación de la LEB Oro, la LEB Plata y la Liga EBA no afecta a nivel organizativo.
A diferencia de lo que sucedió en el sistema de ligas de fútbol en 2021, cuando se creó una nueva categoría, la Primera RFEF, y en consecuencia se cambió el nombre de la 2ª B y la Tercera División (hoy Segunda y Tercera RFEF, respectivamente), en esta ocasión no hay más que una renuncia por parte de la FEB a marcas consolidadas, como eran la LEB Oro, la LEB Plata y la Liga EBA, y la apuesta por unos nombres mucho más genéricos, muy similares a los que pueden existir en cualquier deporte: Primera, Segunda y Tercera… FEB. Se busca tener una repercusión a nivel de naming, pero no se va más allá… por ahora. No obstante, hay que esperar que todo esto pueda venir acompañado de mejoras necesarias, a nivel de retransmisiones o implantación, como adelantaba también La Región, de instant replay, patrocinio, repercusión más allá del ámbito local, en especial en localidades con dinámica ganadora de sus equipos, pero todavía con demasiadas gradas vacías cuando los resultados no acompañan…
Si volvemos la vista atrás, vemos que el anterior cambio de denominaciones de las Ligas FEB se había producido en 2007, cuando la LEB (nacida en 1996, temporada de la que ya hablamos en esta web) pasó a llamarse LEB Oro, mientras la LEB 2 (creada en 2000) pasó a ser LEB Plata, pero entonces sí que hubo una causa de fondo, y no solo de forma, pues se creó la efímera LEB Bronce, desaparecida en 2009. Después, ya sin Bronce, 15 años en los que el sistema de ligas ha permanecido inalterado, siendo esencialmente igual al existente entre 2000 y 2007.
Copa España
En cuanto a la Copa España, cuya creación implica la desaparición de la Copa Princesa y de la LEB Plata, supone una transformación radical. Se pasa de jugar dos finales a partido único a una competición larga y con muchos contendientes, pues jugarán 40 equipos: los 18 de Primera y 22 de Segunda (en concreto, los 20 mejores clasificados de la LEB Plata anterior, más los dos procedentes de Liga EBA que hayan ganado las Fases de Ascenso).
Surge aquí una primera duda, pues en las recientes Fases de Ascenso de Gandia y Llíria no se disputó partido alguno para determinar los equipos campeones, por lo que quedará al albur de la FEB (¿serán Llíria y Archena, atendiendo a la clasificación final de la competición?).
Más dudas: ¿como afectará al calendario? Para empezar, se prevén varias jornadas en septiembre, que condicionarán la pretemporada y también las Copas LEB territoriales que se disputan en varias Comunidades Autónomas. Después, se tendrán que introducir jornadas intersemanales en un calendario ya muy apretado, más aún con las ventanas FIBA.
El sistema de competición presentado por la FEB prevé que los 40 equipos se distribuirán en ocho grupos de cinco, configurados siguiendo criterios de proximidad. Cada equipo jugará cuatro partidos (dos en casa y dos fuera). Los ocho vencedores jugarán en Navidades una eliminatoria de cuartos de final a ida y vuelta, de la que saldrán los cuatro que disputarán la F4 a finales de enero.
¿Cómo se puede hacer esa distribución territorial? Si ya resulta complicado contentar a todos los clubes con la distribución de la LEB Plata, como analizábamos esta misma semana, lo será aún más en una competición en la que habrá equipos de dos categorías diferentes, que no podrán distribuirse equitativamente si se respeta ese criterio geográfico.
Cuando todavía falta por decidirse el segundo ascenso a Liga ENDESA, sin saber con certeza si Archena es el campeón de la Fase de Ascenso de Gandia o si puede haber permutas de plaza o renuncias que afecten a los participantes en la Copa España, intentamos hacer una distribución geográfica de los mismos. Partiendo de la estructura de la Liga EBA, conseguimos estructurar 6 zonas y vemos como solo en la del Grupo AB hay exactamente 5 equipos, mientras que en las del AA y C hay 9 en cada una, por lo que serían candidatas a desdoblarse para llegar hasta las 8 zonas necesarias. Las zonas D y E parecen más complicadas de ajustar (7 equipos cada una):
- Zona AA: Palencia, San Pablo*, Tizona*, Valladolid, Cantabria, GBC *, Zornotza, Iraurgi, Clavijo (6 de 1ª y 3 de 2ª).
- Zona AB: Obradoiro, COB, OCB, Zamora, Ponferrada (4 de 1ª y 1 de 2ª).
- Zona B: Estudiantes*, Fuenlabrada, Gran Canaria, Albacete (2 de 1ª y 2 de 2ª).
- Zona C: Lleida*, Menorca, Ibiza, Palma, Prat, Santfeliuenc, Salou, Mataró, Huesca (2 de 1ª y 7 de 2ª).
- Zona D: Morón, Real Betis*, Algeciras, Huelva, Cáceres, Melilla, Enrique Soler (2 de 1ª y 5 de 2ª)
- Zona E: Castelló, Alicante, Cartagena, Benicarló, Godella, Llíria, Archena (3 de 1ª y 4 de 2ª).
(en negrita, equipos de 1ª; con asterisco equipos que aún pueden ascender a ACB).