Nos vamos hoy hacia Alemania, nada menos que a Speyer (Espira), para hablar con Carlos Hidalgo. El base isleño, nacido en 1997, fue uno de los jugadores más destacados de su generación, tanto en el Real Betis, como con las selecciones de formación, donde en un ya lejano 2013 se llevaba el Oro U16 en Kiev, donde destacaban Yusta y Xabi López. Continúo su formación junior en Sevilla, para volar hacia la cantera de Fuenlabrada entre Plata y EBA; de allí a Azuqueca, donde demostró que es un hombre al que le gusta la continuidad en un mundo del baloncesto tan cambiante. Tras tres temporadas y media destacando, saltaba al Carbajosa de Salamanca en LEB Plata la 20-21. Allí permaneció otras tres temporadas, vivió un descenso y decidió el pasado curso quedarse y ser la referencia, dentro y fuera de las pistas, del proyecto charro en Primera Nacional. Este verano, tras momentos de incertidumbre, salió al mercado para ver si recibía ofertas que le satisficieran y, finalmente, llegó a Alemania, donde ha sorprendido, y se ha convertido en una de las referencias de su equipo.
Zona de Básquet – Muy buenas Carlos, tras muchas temporadas entre LEB Plata y EBA, con varios años de permanencia tanto en Azuqueca como en Carbajosa, donde seguiste en Primera Nacional a pesar de tu buen año en Plata la 21-22, sales al mercado extranjero. Desde fuera pueden parecer un poco extrañas las dos decisiones; la primera, salirte de la rueda el pasado curso quedándote en Salamanca, y la segunda, ¿cómo fue que te “picó el gusanillo”?, ¿había algún motivo extradeportivo como estudios ya finalizados, momento ideal, etc?
Carlos Hidalgo – Buenas tardes Diego, primero agradecerte el interés y elogiar el gran trabajo que hacéis en Zona de Básquet, de la cual soy fiel seguidor y es un placer poder participar.
Totalmente de acuerdo con que puede ser extraña la toma de decisiones pero todo tiene explicación.
Como bien describes mi “carrera” se desarrolla entre dos áreas, Madrid (aunque Azuqueca es Castilla La Mancha) y Salamanca. Esto es sencillo de explicar, yo tenía claro que no me movería de Madrid hasta que no terminara mis estudios de fisioterapia. Después de eso, tenía la intención de priorizar algo más el baloncesto e ir a la mejor opción exclusivamente deportiva. Y entonces llegó la opción de Carbajosa, que durante dos años tuve momentos en los que sentía que podría ser un jugador importante en la LEB Plata y sin embargo dos lesiones y sus circunstancias deportivas asociadas (fichajes, posibles cortes de contrato) frenaron lo que quizás hubiera sido mi despegue.
Esto me afectó bastante a nivel deportivo, teniendo en cuenta que compaginaba la LEB Plata con un trabajo a tiempo parcial en dos jornadas de 10 horas en los tiempos de descanso para no perderme ningún entrenamiento. Pero si alguien tiene interés en saber las condiciones que se viven por las competiciones FEB les animo a escuchar el podcast de Javi Hernández Psych&Roll episodio 29: “Carlos Noguerol. La visita a los infiernos del jugador FEB”.
Todo esto para explicar esa primera “rara” decisión y salir de la rueda hacia primera nacional. Estaba quemado. Tenía 25 años, a los 13 salí de casa para jugar al baloncesto, durante mi etapa de formación tuve muchos éxitos y expectativas que luego se dieron de bruces con una realidad totalmente diferente. Entonces quería dejarlo, dejar de jugar y dedicarme mi futura profesión (Fisioterapeuta). Carbajosa me convenció y al menos seguí jugando en primera nacional.
Después de una temporada casi inmaculada y con un ascenso a EBA no logrado por motivos económicos, me vuelve el gusanillo. Tenía ganas de competir, pero sabía que estaba muy fuera de forma y que en competiciones FEB sería mucho remar para entrar de nuevo.
Y casualmente, hablé con José Medina y él me convenció para que probara con el extranjero dada su experiencia (Francia, Alemania e Islandia). Él sabe que le agradezco mucho que me animara. Y así es como decidí abrirme a un posible mercado extranjero.
ZdB – ¿En verano tuviste varias ofertas, o te decidiste enseguida por el ofrecimiento de Speyer?
CH – Ofertas firmes solo tuve la de Speyer y fue muy rápido. Teniendo en cuenta que me contactaron a finales de Mayo y firmamos el día uno de Junio, en ese momento poco mercado FEB se movía. A pesar de ello, sí que tuve algún interés de equipos EBA y Plata pero las cifras (no seguras) no rondaban ni la mitad de lo que me ofrecían en Speyer.
ZdB – He visto por la red que incluso empezaste clases de alemán este verano en tu casa, para una mejor adaptación, ¿tenías claro que era importante que fueses tú el que tenía que adaptarse al sitio?
CH – Por supuesto comparto que yo tenía que adaptarme a Alemania y una de las claves es el idioma aunque con inglés puedas sobrevivir. Durante el verano estuve dando clases para llegar con algo más que lo que enseña Duolingo, pero tampoco dio para mucho.
ZdB – He seguido desde la distancia tu temporada y la verdad es que desde el primer momento has empezado a un gran nivel y has sido muy regular en tu rendimiento, con muy buenas actuaciones, en una liga que es bastante física, con mucho filial de la BBL y buenos equipos ¿Cómo te has encontrado tú en tu juego?
CH – Cuando hablé con mi entrenador en conversaciones previas a la temporada le comenté que, a pesar de que intentara trabajar en verano, iba a llegar sin ritmo de competición. Me dijo que no me preocupara que teníamos una pretemporada de seis semanas para prepararme.
Sinceramente la temporada ha ido mucho mejor de lo que podía imaginar. Estoy muy contento con los resultados, porque sé de primera mano que aunque trabajes no siempre llegan.
Me costó adaptarme al físico de la liga, con un ritmo más alocado y poca táctica, ademas de un arbitraje que permite mucho más contacto. Eso me ha hecho crecer como jugador ya que físicamente no soy un prodigio, pero creo que en España tenemos un nivel de IQ más alto y he intentado sacar ventaja de ello.
ZdB – El equipo tiene clara una columna vertebral muy configurada, contigo dirigiendo, los centímetros de un “jugador de la casa” como Aichele y el juego total de DJ Woodmore, que lleva muchos años en Alemania, casi todos en Speyer, donde compartió vestuario incluso con Jordi Saltó. ¿Qué nos cuentas de ellos?
CH – Speyer es un clásico de la Pro B, nunca han tenido grandes presupuestos y este año no ha sido diferente. La plantilla se construye alrededor de Aichele, nuestro pívot de 211 cm de la casa, y DJ, que le queda poco de americano ya. Al tener poco presupuesto solo estoy yo como segundo extranjero (en Pro B necesitas tener 3 nacionales en pista) y el resto jugadores jóvenes alemanes sin mucha experiencia que buscan oportunidades.
DJ Woodmore ha sido mi apoyo desde que llegué. Un gran compañero y capitán que como bien dices lleva 7 temporadas en el equipo. Antes de que pusiera los pies en Alemania ya contactó conmigo para darme la bienvenida y ofrecer cualquier ayuda posible. Con respecto a Jordi y otros españoles, os puedo asegurar que; según me cuenta DJ han pasado buenos momentos en Speyer [risas].
ZdB – La apuesta de tu coach es por el juego ofensivo, en un baloncesto que habitualmente solía ser estructurado y de juego lento ¿Sois un rara avis o el baloncesto en Alemania está cambiando en estos niveles menores? ¿Crees qué este estilo te beneficia para que numéricamente (15 pt, 4 re, 4.7 as, 1.5 ro) hayas estallado respecto a tus años de LEB Plata?
CH – Con respecto al tipo de juego, al solo llevar una temporada poca perspectiva puedo ofrecerte, pero mi opinión es que la conferencia sur al estar llena de filiales (Münich, Ulm, Ludwisburg, Frankfurt, Coburg), eso favorece ese tipo de juego ofensivo rápido y desestructurado.
En cuanto a mis números reflejan un poco mi rol de “americano” en el equipo, con 30 minutos de media. Desde el principio me dieron confianza absoluta y carta blanca. Me exigían que aportara puntos además de dirección de juego, rol que en España quizás no tenía. Asumir tantos tiros, tener más posesiones, ha sido algo nuevo y positivo para mí.
ZdB – Os llegan ahora los playoff (Speyer ha perdido su primer partido este fin de semana, la entrevista se realizó la semana pasada), y tal vez sea en el mejor momento de la temporada, con cinco victorias en los seis últimos partidos, y solo una derrota ante el filial del Bayern por la mínima, para entrar en los playoff en el último momento. Ahora os toca el líder del Grupo Norte Rheinstars Koln, campeones en su momento de Alemania, y que tras su refundación buscan reverdecer viejos laureles ¿Cómo veis la eliminatoria, como un premio para disfrutar, y con ánimos de dar la sorpresa?
CH – Hemos terminado octavos con 13 victorias en una liga que ha estado muy igualada, coincido en que es nuestro mejor momento de la temporada especialmente porque llevamos desde Enero sin perder en casa. Koln es un equipo hecho para ascender, con gente con experiencia en ProA y quien sabe cuánto presupuesto. Como bien apuntas esto es un premio para nosotros que nos llega con muy buen timing. Tenemos que aprovecharlo y seguir creyendo que podemos ganar a cualquiera.
ZdB – Respecto a la vida de fuera, Speyer es una ciudad pequeña, acogedora, cruzada por el Rin, con grandes urbes al lado y con Francia a menos de dos horas ¿Cómo ha sido tu adaptación a la ciudad? ¿después de Salamanca, el frio germano ya ni se nota, verdad?
CH – Speyer es una cuidad pequeña pero turística que forma un triángulo con otras más grandes y conocidas como Mannheim (20km) y Heidelberg (30km). No hace tanto frío como la gente piensa, sí que llueve pero en esta zona apenas nieva. Tengo que decir que en invierno que anochezca a las 16:00 horas no apetece. Por otro lado, en verano hace 30 grados como en España (llegué el 19 de agosto).
Mi rutina fue muy fácil de instaurar, ya que el club se encargó de conciliar el trabajo con las horas de entrenamiento y pensar en el más mínimo detalle.
No he podido hacer muchas escapadas, tengo pendientes muchos sitios que visitar a menos de un par de horas de coche.
ZdB – Por último, después de esta gran temporada, cómo te planteas tu futuro a corto plazo ¿Te gustaría seguir en Speyer, crees que equipos de ProA se han fijado en tu buena labor, probar otros países, o incluso te planteas un regreso a España?
CH – Ahora mismo estoy centrado en intentar dar algún susto en los playoffs. No obstante, sí pienso en el futuro nunca cierro puertas a nada. Considero que estoy en un buen momento personal y físico. Estoy a gusto en Speyer, seguro que hablaremos final de la temporada.
Siendo realista, a día de hoy la ProA me costaría a nivel físico y creo que la probabilidad de que salga alguna oportunidad es baja.
Jugar en otros países es una posibilidad. Volver a España claro que me gustaría pero no a toda costa.
ZdB – Muchas gracias por tu tiempo Carlos, y enhorabuena por tu enorme temporada.
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