La cuarentena ha sido muy negativa para todos los amantes del baloncesto, nos dice Ismael Herrero (1996), base de Zentro Basket Madrid, y ha afectado “para mal a todos los jugadores”, pero también a los clubes.
El futuro de muchos jugadores “pasa por la parte final de la temporada, como son playoffs, fases de ascenso o final fours” en los que surgen oportunidades para la siguiente, precisa el jugador. El parón “nos ha quitado la parte más bonita de la temporada como jugadores y como aficionados”, porque los finales son momentos “que a todo deportista le gusta jugar” y por los que “lleva trabajando toda la campaña”. En lo que a Zentro se refiere “nosotros estábamos jugando el poder ir a la Fase de Ascenso a LEB Plata” y que de repente te digan que la temporada está acabada y “que no vas a poder pelear por ello, es una dura noticia”.
Talentoso y creativo, Isma es un jugador inquieto y nervioso, lo que si bien le lleva a cometer “algunos errores en la toma de decisiones”, también es “un gran valor en sí mismo porque hace que vea cosas que otros no son capaces de ver”. Así define a Ismael Herrero el entrenador ayudante de Zentro, Dani Molina, quien explica que el jugador procede de la cantera del San Viator, pero se formó desde cadete en la del Real Madrid. Con experiencia en selecciones formativas, es un jugador completo “delgado, escurridizo, tremendamente creativo y explosivo”, añade el técnico, que con el paso de los años ha ido mejorando el tiro hasta convertirlo “en un arma bastante eficaz”.
Ismael Herrero también habla de las consecuencias de la pandemia en los clubes y aunque “como jugadores no tenemos conocimiento de todo el trabajo que hacen” es fácil pensar que ha sido “un duro varapalo tanto económica como deportivamente para todos”, aunque cree que para unos más que para otros. “No solo han perdido dinero, sino también van a dejar de ganar”, dice Ismael, que precisa que si un club invierte en una temporada y ésta “se corta a la mitad” está perdiendo, y con un futuro tan incierto supone que será difícil “conseguir patrocinios y ayudas, importante para su estabilidad económica”.
En lo deportivo cree que también está siendo difícil para muchos clubes y pone como ejemplo el suyo, Zentro Basket Madrid. “Había mucha ilusión y mucha incertidumbre por lo que este final de temporada nos iba a deparar”. El Cadete A estaba clasificado para playoffs “y soñando con una Final Four que era posible”; el Júnior A, en una situación similar, mientras que el Primera Nacional era segundo y también estaba clasificado para playoffs. Además, el EBA estaba en puestos de jugar la Fase de Ascenso a Plata y con el final de la temporada “muy de cara”, afirma Herrero, que asegura que para Zentro “estaba siendo un año de mucho crecimiento a nivel competitivo” y ha sido “un duro golpe” porque también para su futuro el final de temporada es muy importante.