Parece que el camino hacia la ACB desde lo que era la LEB Oro, ahora Primera FEB, es un paso natural y a veces ese curso en la segunda categoría del baloncesto español supone un paso muy importante en las carreras de los jugadores, donde tal vez los equipos de Liga ENDESA no apuesten de forma directa por ellos por la barrera que supone ser extracomunitarios, pero sí que es un valor activo su formación en Ligas FEB para su desarrollo y crecimiento profesional.
Claros ejemplos los hemos visto este verano, Kur Kuath fue la 23-24 el MVP de la F4 en un Força Lleida que barrió a sus rivales. El interior no quiso esperar y se fue a la BBL a un Hamburg que no hizo una temporada buena estando en la zona baja de su liga doméstica y siendo de los peores de la Eurocup pero Kuath fue un cinco sólido y uno de los mejores defensores de la BBL. De esta forma el internacional sursudanés que pasó por Grecia sin éxito, mostró detalles en Ourense y explotó en Lleida, confirmó sus prestaciones en Alemania, y tras ser rondado por varios equipos, llega a la pintura del Gran Canaria como sustituto de Conditt.
Si miramos a los jugadores que nos destacaba hace dos años Carlos Mirás a final de temporada sobre aquello edición de Oro, vemos que hay jugadores que se han revalorizado en la ACB. Juani Marcos ha sido recuperado nada menos que por el Barcelona, tras dos años buenos en Girona, y vuelve al equipo que le trajo a España. Ojo también a Jan Pantzar, MVP de la Fiba Europe Cup, valor activo de Bilbao y que, con su crecimiento, ha sido ya firmado por el Unicaja, que lo ha dejado cedido un curso más en el equipo vasco. Otros cupos también se han consolidado como “gregarios” de lujo como Chumi Ortega establecido en Andorra, un Felipe Dos Anjos aún sin equipo buscando una oferta buena o un Atoumane Diagne que ha llegado a Lleida y quiere ser considerado con la etiqueta de jugador ACB, como Guillem Ferrando que quiere ganar en protagonismo en Girona.
Ojo porque en esa promoción 22-23 estaba Justin Jaworski, tras su año de explosión anotadora con fuga final, su paso por Italia y Alemania, dejaron entrever que el sigue siendo un killer allá donde va, y eso ha sido decisivo para que Bilbao Basket apostará por él.
La temporada 23-24 también fue variada, por un lado la juventud nacional con jugadores que deberían ser la base de la selección nacional a corto plazo. Mario Saint-Supery y Rubén Domínguez mostraron su calidad y demostraron estar preparados para jugar en la ACB, pero la llamada de la NCAA con los bolsillos llenos de dólares americanos en forma de NIL, les hizo emprender esta nueva aventura la 25-26. Algo a lo que no sucumbió Rafa Villar, al que su proyección e intensidad en el juego a pesar de su déficit en el tiro exterior, hizo que pasara de jugar en Lleida este curso a hacerlo en Euroliga con el Baskonia.
Un Lleida que por cierto, ha sido valiente y ha apostado por Millán Jiménez para este curso, que llega cedido por el Valencia y que, tras jugar en varios proyectos top de Primera FEB, busca consolidarse en la máxima categoría. Ojo a la oportunidad de Héctor Alderete en Canarias, un jugador que tras dejar olvidadas las lesiones tiene versatilidad y calidad para consolidarse. También dos nacionales buscan aprovecharse del tema cupos y establecerse en ACB: por un lado Aleix Font, que parece que será un curso más ACB tras regresar con Coruña el pasado curso, y un Jaime Fernández que ha rendido perfectamente en Zaragoza ganándose la renovación y siendo un pilar como hombre de la casa.
Otros jugadores han llegado pero parece que están en el camino de ida y vuelta. Aurrecoechea pegó el salto con Granada el curso pasado en una temporada de altibajos en general y lesiones, su lucha siempre ha sido un imprescindible y, aunque iba a volver a Primera FEB, la recuperación de la plaza por Granada hace que el campeón de mundo de 3×3 repita en ACB. Ojo que el caso de Granada que empezó la planificación pensando en 1ª FEB ha hecho que confirme muchos de sus fichajes para esta categoría en plan ACB. De esta forma, Micah Speigh, vuelve a España para hacerlo al fin en ACB, Travis Munnings da el salto a la máxima competición nacional tras su gran curso en Fuenlabrada. Una categoría que volverán a pisar con los nazaries dos viejos rockeros como Edu Durán y Tunde.
Otro jugador que vuelve a la ACB es Juan Rubio tras un año en Estudiantes en 1ª FEB, que acompaña a otros cupos con experiencia en ambas categorías como Pablo Almazán y Dani Díez en la vuelta de San Pablo Burgos a la ACB.
Más corta fue la estancia de Arnau Parrado, que tras firmar en ACB, una lesión le impidió debutar, o un Dídac Cuevas ya consolidado en equipos top de 1ª FEB tras su paso por Zaragoza o el uruguayo Joaquín Rodríguez (del que no sabemos que será de su destino, aún con contrato en Zaragoza) y que como en los anteriores casos, no encontró un rol adecuado, y prefirieron ser cabeza de ratón en Primera FEB.
Este curso 25-26 veremos otros jugadores de calidad pegando el salto, desde las filas de San Pablo Burgos llegará al fin Gonzalo Corbalán, un verdadero puñal argentino, o la sobriedad del base islandés Jon Axel Gudmundsson, que ya ha demostrado en Italia su capacidad para jugar en ligas top. Gerard Encuentra ha apostado fuerte para el Lleida por Cameron Krutwig, un fichaje que tal vez muchos no entiendan desde un punto de vista físico pero con su IQ y su calidad, que lleva demostrando años desde que jugó al alto nivel de NCAA seguro que puede sorprender. A eso se sumarán jóvenes que vuelven y que quieren mostrar su potencial como Langarita, Nzosa y Rubén López.
No debemos olvidarnos de Mark Hughes, jugador de enorme calidad y que tras ser diferencial en el Real Betis en la F4, dará el salto con la escuadra sevillana si los juzgados le dan la razón o si el Girona confirma su fichaje según anuncian diferentes medios.
Otros de los jugadores sin pasado tan reciente pero que disputaron la Oro y llegarán a la ACB es Wes Van Beck que jugó en la mencionada Oro 21-22 llegando desde Colombia nada menos, y su poderío anotador le hizo destacar. Las dudas sobre su físico hicieron que tuviera que coger el camino largo para pasar por Estonia, Alemania y ya cumplir de forma estelar en Turquía para llegar a un equipo de arriba como Canarias. No debemos olvidarnos de también jugadores como Ibou Badji, que no sabremos si regresará a USA o buscará seguir en ACB donde es un cupo interesante, y que la 22-23 estaba siendo el protector del aro ilerdense.
Muchos ejemplos de jugadores cuyo paso por Primera FEB fue fundamental para sus carreras y para poder llegar a la Liga ENDESA, algunos de forma destacada tras esa etapa de apendizaje.
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