Solo quedan siete finales y Silbö San Pablo Burgos acaricia el ascenso directo, ese que se le escapó las dos temporadas anteriores y tampoco pudo ejecutar en las F4. Bruno Savignani ha calado y de qué forma: lejos de discursos grandilocuentes desde la entidad, el trabajo, el partido a partido y la discreción han hecho su trabajo, como el de un equipo donde cada jugador ha sabido asumir su rol para sentirse imprescindible, de forma que jugadores como Stumbris o Wembi se han hecho tan necesarios como los Corbalán, Cremo, Fischer o Gudmundsson.
Los burgaleses, con su gran afición por detrás, no han bajado sus medias en estos últimos partidos y el ritmo de posesiones sigue siendo el mismo, rebotean algo menos y, aunque meten menos desde el triple y asisten un poco menos, el equipo roba más balones en defensa y sus porcentajes de lanzamiento global siguen idénticos. Un equipo que esta realizando una temporada inmaculada, con solo dos derrotas. Un dato que de mantenerse volvería a ser histórico, con el que superarían los datos en liga regular de equipos como UCAM, Real Betis o Andorra, que sumaron cuatro derrotas durante la temporada.
El calendario que les queda en esta Primera FEB indica que no hay rival fácil, pero ¿quién puede detener a este equipo? Su camino es jugar en casa ante un Zamora que quiere colarse en los playoff, dos salidas complicadas siempre por ser pistas pequeñas ruidosas como Alimerka Oviedo y Alega Cantabria. Luego en jornada intersemanal reciben en casa a un Flexicar Fuenlabrada venido a menos las últimas jornadas. Luego volverán a tener dos salidas fuera contra dos equipos que andan por la zona de abajo como Inveready Gipuzkoa y Hestia Menorca, para cerrar la liga en la Jornada 34 contra Movistar Estudiantes, lo que podía ser un partido decisivo en el Coliseum de Burgos puede quedarse en un partido intrascendente o en el intento de un record. Lo que está claro, es que parece complicado que San Pablo pierda esta oportunidad, o falle, su convicción en el juego, su proyección y este calendario puede ser decisivo.
Por detrás, Movistar Estudiantes es su perseguidor a dos victorias más el average de la ida favorable para los burgaleses. En plena tormenta, tras la salida de Pedro Rivero, cesado tras siete victorias seguidas, y que en unas declaraciones a Marca relataba como fue su salida, donde ni siquiera se le comunicó en persona y el documento se le mandó por whatsapp, en un cese que ni la plantilla esperaba. Su sustituto es un hombre de peso, Natxo Lezkano, cesado por el equipo de Andorra de ACB, pero amplio conocedor de la categoría, aunque su debut ante Obradoiro en plena tormenta, se saldó con derrota, y la sensación de no poder llevarse el partido. Semanas por delante para seguir con el sueño vivo, o volver a intentar llegar por la F4 donde otras veces fracasaron.
Por detrás, Flexicar Fuenlabrada lleva cinco derrotas, con posibles aspectos extradeportivos afectando, los de Toni Ten siguen sumando, sacando partidos duros y haciendo una piña dentro que tal vez pueda tener su premio en el momento crucial. No pueden descuidarse, Real Betis, con seis derrotas, sigue sumando triunfos y aunque todavía tienen un duelo directo entre ambos, el +17 de la ida a favor de los madrileños puede darles cierta cancha aún.
Los otros dos transatlánticos que quedan se han quedado descolgados, Súper Agropal Palencia con 9 derrotas se ha visto afectado por su corta rotación y Monbús Obradoiro (con un partido menos vs Cantabria) está con nueve derrotas también, un equipo que obviando a San Pablo, parece ahora mismo el favorito de la liga. Los refuerzos de alta calidad como Barcello, Balvin, Brodziansky o Faggiano, unidos a una plantilla de calidad, hacen que el impacto económico de los gallegos se traslade a la cancha, y sea un equipo que va hacia arriba.
Así están las cosas por arriba en una Primera FEB, donde Silbö San Pablo Burgos es sin duda el candidato top que puede romper los registros en esta competición.
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